Breve Biografia de Castro Centeno
No temo equivocarme si afirmo que la sola mención del nombre de Demetrio Castro Centeno, me exime de mayores presentaciones. Nacido en la localidad de La Ilusión, provincia de Entre Ríos, Argentina. Con su familia, a temprana edad, se trasladó a la ciudad de Córdoba, donde completó sus estudios en Filosofía y Letras. Su figura sobrevuela la cultura latinoamericana, ejerciendo sobre ella una influencia indubitable. Hombre culto, inquieto, viajero incansable. Supo granjearse la amistad y el respeto de grandes dignatarios, como así también del pueblo llano.
Su obra traspasa las distintas disciplinas. Y en ella se yuxtaponen e imbrican la historia, la filosofía, la sociología, la antropología, la ecología. Desde aquella formidable obra de sus inicios, que le otorgó fama y prestigio “Breve Historia Argentina del siglo XX”, utilizada hasta el día de hoy en el ambiente académico, como fuente de consulta, porque su brevedad casualmente permite una rápida revisión. Obra lacónica.
Su carrera prolífica y diversa siguió ascendiendo sin techo. Su segunda obra, publicada en Santiago de Chile, debido a la inestabilidad política argentina ( Castro Centeno era blanco de amenazas de distintas agrupaciones de extrema izquierda y de extrema derecha, asi como del gobierno de facto, siempre recuerda cuando en una de las jornadas del cordobazo lo amenzaron "correte pelotudo que ahi va la barricada!!!") titulada: “Introducción al estudio de los asentamientos guaraníes del siglo XVIII, desde la óptica del los pueblos del norte de África”, fue aclamada en todos los foros internacionales y reivindicada por los pueblos originarios americanos, como por los bereberes. Esto le abrió las puertas a una beca, que lo llevó a España dando inicios a su trascendental “ Etapa Madrileña” que coincidió con el retorno de la democracia y el destape español. En Argentina eran los años de plomo. Mucho se ha escrito sobre esta época de su vida, y el lector puede recurrir a innumerables y accesibles fuentes bibliográficas referidas a ella. La iconografía no es menos abundante, pudiéndose ver a nuestro autor con un aspecto típico de aquellos años, pelo largo, anteojos de sol, camisas multicolores y pantalones oxford, fumando marihuana. Fue muy difundida una portada de la revista “Frentes y perfiles” donde se lo ve junto a James Hunt, conocido corredor de autos y play boy de la época, en el circuito de Jarama, firmándole el buzo antiflama al piloto. Ya para esos años Castro Centeno era una estrella mundialmente reconocida, más aún que Garcia Márquez ( recién publicaba Cien años de Soledad dos años antes) o Umberto Ecco. Quizás a la altura de rock star como Mick Jagger, Lennon o Presley. Muchos al analizar esta larga década, afirman que fue perjudicial para su trabajo. Su permanente exposición pública, el acceso fácil al ambiente de la alta sociedad europea de la época, lo expuso a la vida disipada y las adicciones. De estos años es conocida una foto con la duquesa de Alba( ya ajada climatérica) y Carolina de Mónaco(en la plenitud de su belleza) durante una excursión en yate por el mediterráneo. Es sabido, el uso que le dieron sus detractores, que lo llamaron mentecato botarate, o tonto fantoche, rojo de salón, movidos por la envidia y la impotencia. O porque se afirmaba que por entonces mantuvo un affaire con la duquesa y no con la princesa, en fin gustos son gustos. En este último caso quizás movidos por la sonsera ajena.
La traducción de sus obras a múltiples idiomas lo llevaron a convertirse en un conferencista trotamundos, aclamado en todo el orbe. Requerido por todas las grandes capitales, desde Beijing a Londres, de Washington a Montevideo.
Para contradecir las afirmaciones antes expresadas, en esta Etapa Madrileña escribió una gran obra, que si bien tardó en ser reconocida, el tiempo la colocó en merecido lugar de privilegio. Rechazada en primera instancia por Planeta, Random House, Santillana, Tusquet por tratarse de un “mamotreto indigesto” según la expresión utilizada en su momento, por el famoso editor Alcides López Anzorena. Logró ser publicada por una editorial turca Yapi Credi o Can, no pude corroborar con certeza cual, pues mi conocimiento de turco es extremadamente escaso. Esta edición presentó grandes dificultades de traducción, fue publicada en turco, lo que probablemente contribuyó a su inicial fracaso editorial. Por todos conocido que el alfabeto turco tampoco es muy difundido, en el resto del mundo, al menos para el público en general. Nos referimos a “Somero análisis de la idiosincracia uruguaya en relación a la pesca de costa o embarcado. Su influencia sobre la bolsa de Valores” . Castro Centeno no se dejó amedrentar por este fallido inicial, aúpado en su prestigio como conferencista y en sus relaciones con la aristocracia, logró una muy limitada edición privada, en castellano, que fue enviada como obsequio a diversos personajes de influencia. Así poco a poco se fue revirtiendo la suerte de esta obra. Hoy obra de consulta de tantos estudiosos de la sociedad y las finanzas. Los gurúes comenzaron a comprender lo azaroso y contingente de la pesca. El movimiento de las mareas y los vaivenes del mercado.
A mediados o fines de la década del noventa, luego de un breve interregno en que se afincó en Capilla del monte, a los pies del Uritorco, decide trasladarse a Nueva York. No lo hace de forma directa, por cortisimos períodos vive en La Paz, Lima y Manaos. Finalmente alrededor de 2001, comienza una etapa de recogimiento voluntario, aislándose casi por completo. Realizó un proceso de desintoxicación y rehabilitación de sus adicciones a drogas duras. Alguno de los escasos amigos que lograron verlo en estos años, afirman que como aquel mítico monje de Villa La Ola, Juan Pérez de Roldán, habría tapiado las ventanas. Lo describen como un paranoico patológico, casi auto emparedado. Es el lapso de tiempo, de más de 15 años , muchos especularon con su perdida de la razón, crisis de misticismo o incluso la muerte. Es la llamada “Etapa Neoyorquina” oscura, solitaria, en cuyo transcurso fue prácticamente olvidado por los medios de difusión masiva. Pasó de ser una celebridad a convertirse en un mito. Un ausente, un olvidado que es lo que sigue a la ausencia.
Murió al caer por una escalera el 25 de Enero. Nadie conoce los detalles del suceso, porque se encontrabqa absolutamente solo. Sus amigos publicaron su obra póstuma “Enumeración incompleta de los motivos de la destrucción del ambiente. Análisis crítico del pensamiento dominante en ibero américa, sobre la preservación del hábitat de la fauna autóctona. La inundación de Bahía blanca y Santa fe. El chocolate con churros en la costa Atlántica, su influencia sobre la biosfera.” que será presentado mañana en Biblioteca Nacional.Mariano Moreno, Aguero 2502, CABA a las 21,30 hs.
Comentarios
Publicar un comentario
La opinión siempre es bienvenida incluso las que sean críticas porque ayudan a pensar o mejorar en caso de una obra literaria. Los vituperios, insultos, opiniones xenofobas o discriminadoras serán eliminados.